Se acerca el gran momento. Sólo falta un día y medio para que, mañana jueves 13 a las 23:59, la campaña de cofinanciación de Trazeo llegue a su fin. Desde que el día 26 de noviembre arrancó esta aventura, cientos de personas nos habéis apoyado, con euros, en especies, con difusión o simplemente con palabras de ánimo cuando el proyecto más lo ha necesitado. Gracias a todos vosotros, desde el día 3 de enero ya sabemos que la herramienta que proponemos para que las calles vuelvan a llenarse de niños y niñas se va a desarrollar, y a partir del viernes, el equipo se pondrá manos a la obra para que pronto puedan usarla libremente personas de todo el mundo.
Sólo queremos pedirte un último esfuerzo para conseguir cubrir la pequeña diferencia que nos separa del presupuesto óptimo del proyecto. Estamos a exactamente 1500 euros de lograrlo, y alcanzar esa cifra nos permitirá desarrollar todas las funcionalidades que teníamos previstas. Podremos implementar un sistema de notificaciones que permitirá, por ejemplo, que los grupos puedan informar a los ayuntamientos, a los colegios o a los miembros de la comunidad que así lo deseen, de necesidades que encuentran cuando caminan por la calle. También podremos hacer que los diferentes grupos se gestionen como una red social, aumentando el impacto en la comunidad y las posibilidades de que cada vez más gente se incorpore a la práctica de caminar en comunidad al cole.
“+sumamos +logramos”. Ese es el lema de final de campaña que hemos elegido para que los últimos rezagados se suban a nuestro carro. Porque sabemos que hay muchas personas que nos han dicho que quieren ver esta idea tomar fuerza en las calles de nuestras ciudades, pero aún no han dado el paso, y su aportación en estas últimas 36 horas puede ser decisiva. ¡Ayúdales a dar ese paso! Os pedimos que hagais un último llamamiento a través de vuestras conversaciones, blogs, redes sociales, teléfonos, tamtames, o cualquiera de vuestras herramientas de comunicación habituales.
Para que nadie pueda decir luego que no se enteró a tiempo de que un grupo de irreductibles ciudadanos, que creían en ciudades más amables para la infancia, estaban empezando a transformar el mundo y necesitaban de su ayuda.